Hay una historia en las sagradas escrituras sobre un Rey que no escuchó el sabio consejo, y el mal le alcanzó.
“Entonces el rey Roboam pidió consejo de los ancianos que habían estado delante de Salomón su padre cuando vivía, y dijo: ¿Cómo aconsejáis vosotros que responda a este pueblo? Y ellos le hablaron diciendo: Si tú fueres hoy siervo de este pueblo y lo sirvieres, y respondiéndoles buenas palabras les hablares, ellos te servirán para siempre. Pero él dejó el consejo que los ancianos le habían dado, y pidió consejo de los jóvenes que se habían criado con él, y estaban delante de él” (1 Reyes 12:6-8).
¿Por qué tomamos malas decisiones?
Actualmente, son muchas las personas que atraviesan dificultades por sus malas decisiones, debido a que creen gozar de sabiduría propia “
El camino del necio es recto a sus propios ojos, mas el que escucha consejos es sabio” (Proverbios 12:15) o simplemente porque son influenciados por quienes presumen poseerla.
El propósito de Dios para cada uno de nosotros es que vivamos eternamente llenos de plenitud. Por eso, todos nuestros proyectos debemos encomendarlos a él.
“Muchos son los planes en el corazón del hombre, mas el consejo del SEÑOR permanecerá” (Proverbios 19:21).
Quizás por esto, tus planes aún no se cumplen
Si estás tratando de lograr algo y no se ha dado, tal vez no está dentro de los planes del Padre. Sin embargo, no te aflijas. Al contrario, alégrate “Escucha el consejo, y recibe la corrección, para que seas sabio en tu vejez” (Proverbios 19:20).
Lo ideal es que tomes la iniciativa de acercarte a Jesús a través de su Palabra, la cual está llena de sabios consejos que jamás te harán fracasar. “Sin consulta, los planes se frustran, pero con muchos consejeros, triunfan” (Proverbios 15:22).
Por desgracia, la mayoría de las veces dejamos que nuestras decisiones sean influenciadas por quienes no tienen la sabiduría suficiente o simplemente por aquellos que nos desean el mal.
“Fieles son las heridas del amigo, pero engañosos los besos del enemigo” (Proverbios 27:6).
Solo Dios nos ama desinteresadamente, por eso sus planes para nosotros son de paz.
Aférrate a su Palabra, sé sabio
Como seres humanos debemos cuidar muestro corazón porque de él depende nuestra vida.
Así también guardemos la Palabra del Señor porque ella es nuestra vida “Aférrate a la instrucción, no la sueltes; guárdala, porque ella es tu vida” (Proverbios 4:13).
Cuando te encuentres en aprietos y encuentras a alguien que te pueda orientar, sin envidia ni malos deseos, sigue el consejo de los sabios. No sea que entristezcas al Padre y cierre tus sentidos para que no puedas ver llegar el infortunio“. Roboán no quiso escuchar al pueblo porque ya el Señor así lo había dispuesto. Su propósito es el de confirmar lo que había dicho a Jeroboán hijo de Nabat por medio de Ajías el silonita” (1 Reyes 12:15).
Y tampoco permitas que otros sean condenados por tu causa “Y cuando Roboán envió a Adorán a cobrar los tributos para el rey, el pueblo de Israel lo apedreó hasta matarlo” (1 Reyes 12:18).
Conclusión
Dios quiere creyentes prudentes, atentos al dictamen y que acepten amonestaciones. ¿Sabes por qué? Porque solo él es, fue y será el único sabio. Busca al Señor y práctica su Palabra, si quieres llegar a viejo escucha el sabio consejo de Dios Padre bueno.